Oaxaca: El secuestro de la mirada

La lucha proletaria en Oaxaca existe y triunfa incluso contra las pantallas televisivas de la burguesía.

Fernando Buen Abad Domínguez
Rebelión/Fundación Federico Engels

Corriente Internacional de la Comunicación Desde Méxco

Dicen “ojos que no ven… corazón que no siente” y agarrados de esa “máxima” popular los oligarcas mediáticos usan la tele (su tele legalizada a punta de fraudes) para hacer invisible la lucha esplendida de Oaxaca. Pone la burguesía toda su carne visible sobre el asador de las pantallas mercenarias para distraer la mirada, para que no se vea y no veamos lo que realmente importa ver. Ponen a sus lebreles y los llaman “políticos”, ponen a sus payasos y los llaman “funcionaros”, arman un carnaval de ególatras y mentirosos que se hacen pasar por “representantes verdaderos”… las pantallas de esa tele rebozan inmundicia visual con peleles relamidos cuya tarea perversa es profundizar la represión, garantizarla y hermosearla. Con saliva burguesa, claro, y sueldos estratosféricos.
El crimen mass media organizado bajo la bendición de los burócratas más serviles consiste en borrar toda presencia visual de la lucha oaxaqueña y sus triunfos… consiste en barnizar con calumnias y odio todo cuanto suene, huela y luzca como avance y triunfo de las clases oprimidas. La tarea suprema de los pulpitos mediáticos mercantiles es vender su carroña ideológica con amenaza, miedo, zozobra y extorsión; como si fuesen logros morales. Es decir predican basura ideológica para hacer creer a quienes luchan que su causa está perdida. No nos traguemos ese anzuelo.
Para lograr semejante trampa llenan sus “informativos” con palabrería de corruptos, delante y detrás de las cámaras. Dicen que “eso es lo importante”, dicen que “esa es la verdad”, la “justicia”, el “orden”… dicen que debemos mirar sólo eso, que nada hay más importante, que con sus imágenes en primer plano, panorámicas, plano americano, zoom in, zoom out, panning, travelling… tenemos “todo lo necesario para estar informados”. Dicen que lo verdaderamente “valioso”, lo absolutamente cierto, lo que realmente importa es lo que presenta la televisión mercantil, la televisión burguesa con “periodistas” burgueses amaestrados por sus amos para asesinar la verdad en público, noche a noche, día a día.
Es una trampa perversa con armas de guerra ideológica. Nos obligan a “ver” lo que ellos quieren, como a ellos les conviene, con la profundidad y extensión que ellos deciden y siempre con mentiras y calumnias. Plagan la realidad con “interpretes” o “traductores” mercenarios e innecesarios llamados “reporteros” para anular los testimonios directos de los actores de las luchas. Plagan la pantalla con “políticos” opinadores a destajo, que se regodean con sus peinados, trajes y giros léxicos bajo las cataratas de su vanidad televisada. Nos obligan a mirar su versión degenerada de los hechos como si fuese la verdad absoluta. Pero su trampa hiper- tecnológica será denunciada una y millones de veces.
Mientras en el microcosmos de las pantallas televisivas burguesas se desgañitan en silencio los instintos de clase más criminales, camuflados de periodistas y comunicólogos, en el mundo real Oaxaca lucha contra las opresiones de todo tipo, las amenazas y las represiones. Para verlo claro sólo basta con liberar la mirada de las trampas televisivas. Para verlo, bien claro, sólo basta con poner la mirada en la ruta correcta al lado de todas las miradas en pie de lucha. Poner la mirada donde la ponen quienes ven más claro cómo hay que pelear contra el maremagno de corruptos y asesinos encaramados en los gobiernos y en los noticieros. Para ver claro hay que ver con los ojos de la lucha, ver clarito quién es el enemigo de clase y no quedarse atrapados en su “punto de vista” televisivo que nos vuelve invisibles e invidentes.
Hoy nos urge mirar en toda la extensión de sus imágenes la belleza convulsiva de la lucha oaxaqueña y su metralla de futuro que, hora tras hora, madura en los hormigueros de la esperanza más febril y más certera. Hoy nos urge mirar la realidad mundialmente y sin censura funcional, sin censura subliminal, sin traductores traidores, sin intérpretes asalariados para la traición. Nos urge ver bien lo que las luchas hacen de abajo a arriba, para auto-defenderse y construirse sobre un camino lleno de peligros, amenazas y agresiones. Con un futuro pleno de conquistas revolucionaras. Ver con cuidado dónde se pisa y dónde se esconde el enemigo. Ver a todas luces los avances y las tareas pendientes. Liberar la mirada, pues, de sus cepos mass media. Eso que enseñan los señores de la tele burguesa lo enseñan para distraer la mirada, para entretenerla mientras entretienen y envenenan las ideas, eso que enseñan los señores en su tele tiene el objetivo de escondernos las verdades más hondas de nuestras luchas: la razón, la justicia, la derrota del capitalismo y de todas sus burocracias serviles. La autodefensa también consiste en analizarlos, denunciarlos y superarlos. Hay que llamar a todos los medios de comunicación solidarios con la lucha en Oaxaca para organizar y profundizar acciones mundiales contra la represión, el abandono, el desgaste y el asesinato que pesa sobre quienes luchan ejemplarmente desde un escenario que es de todos y para todos a estas horas. Ver clara nuestra tarea. Nadie puede ser indiferente en esta lucha oaxaqueña y mundial. Nadie puede hacerse sordo porque terminará siendo cómplice