LA HUELGA FRANCESA EN EL DIA DEL TRABAJO GRATIS
No se si sabíais, yo me enteré hace poco, que en el estado francés existe un «día del trabajo gratis». No es un eslogan o una locura, no; es una realidad. La cosa viene porque allá por el verano de 2003 murieron muchas personas, en su mayoría de elevada edad, a causa de una inmensa ola de calor.
Al estado francés, que podía haber estado mejor prevenido y preparado para evitar tanta muerte, no se le ocurrió otra cosa que imponer a los trabajadores mediante una ley el «día del trabajo gratis pro-mayores», concretamente el lunes Pentecostés (día tradicionalmente festivo). El estado francés culpa así (más bien castiga) a la clase trabajadora de la muerte de cientos de personas por una ola de calor, cuando es precisamente el estado (o eso dice él) quien debe estar prevenido ante catástrofes de ese tipo.
Trabajar por un salario ya es indigno en sí mismo. Trabajar gratis, no tiene nombre. De una catástrofe y una incompetencia administrativa saca tajada la patronal pues el estado (su mejor guardián) obliga vía ley a la clase trabajadora a trabajar por el morro. La plusvalía de ese día es abrumadora alegando una solidaridad y caridad «pro-mayores» que deja un olor podrido a judeo-cristianismo.
Los mismos sindicatos que han pedido el NO a la Constitución Europea porque precariza el trabajo no dijeron ni «mu» ante esa inusitada ley, algunos de ellos se aglutinan bajo las siglas CGT (casualidades de la vida y de las siglas, curiosas coincidencias).
En una comarca francesa llamada Gard, que es relativamente grande, con sus escuelas, sus funcionarios, sus fábricas, etc...., el pequeño sindi- cato de la CNT-AIT-Education fue el único que convocó huelga para dicho día. Con muchas ganas, los y las cenetistas frances@s, se levantaron con ánimo y empezaron repartiendo propaganda por la ciudad más grande de Gard que lleva por nombre Ales; hicieron piquetes, informaron a la gente... Organizaron una manifestación delante del instituto Dumas, uno de los más grandes de toda Francia y más del 90% de los profesores y alumnos se sumaron a la huelga, cual fue su sorpresa cuando comprobaron que todos los centros educativos estaban paralizados, los transportes no funcionaban, los comedores, los co mercios y las cafeterías tampoco; incluso correos estaba cerrado.
La desobediencia civil, la huelga (esa herramienta de lucha que quieren extinguir) fue un duro golpe para los representantes del Estado y la Patronal en Gard; y fue secundada mayoritariamente ante el asombro de los partidos políticos y los sindicatos «representativos». El Presidente del Consejo general del gobierno del departamento, con indignación, calificó la huelga de «mierda organizada».
Una mierda organizada contra el «día del trabajo gratis», contra el colmo de los colmos. Una mierda organizada que me puso contento.
Crespo
www.lahaine.org
Al estado francés, que podía haber estado mejor prevenido y preparado para evitar tanta muerte, no se le ocurrió otra cosa que imponer a los trabajadores mediante una ley el «día del trabajo gratis pro-mayores», concretamente el lunes Pentecostés (día tradicionalmente festivo). El estado francés culpa así (más bien castiga) a la clase trabajadora de la muerte de cientos de personas por una ola de calor, cuando es precisamente el estado (o eso dice él) quien debe estar prevenido ante catástrofes de ese tipo.
Trabajar por un salario ya es indigno en sí mismo. Trabajar gratis, no tiene nombre. De una catástrofe y una incompetencia administrativa saca tajada la patronal pues el estado (su mejor guardián) obliga vía ley a la clase trabajadora a trabajar por el morro. La plusvalía de ese día es abrumadora alegando una solidaridad y caridad «pro-mayores» que deja un olor podrido a judeo-cristianismo.
Los mismos sindicatos que han pedido el NO a la Constitución Europea porque precariza el trabajo no dijeron ni «mu» ante esa inusitada ley, algunos de ellos se aglutinan bajo las siglas CGT (casualidades de la vida y de las siglas, curiosas coincidencias).
En una comarca francesa llamada Gard, que es relativamente grande, con sus escuelas, sus funcionarios, sus fábricas, etc...., el pequeño sindi- cato de la CNT-AIT-Education fue el único que convocó huelga para dicho día. Con muchas ganas, los y las cenetistas frances@s, se levantaron con ánimo y empezaron repartiendo propaganda por la ciudad más grande de Gard que lleva por nombre Ales; hicieron piquetes, informaron a la gente... Organizaron una manifestación delante del instituto Dumas, uno de los más grandes de toda Francia y más del 90% de los profesores y alumnos se sumaron a la huelga, cual fue su sorpresa cuando comprobaron que todos los centros educativos estaban paralizados, los transportes no funcionaban, los comedores, los co mercios y las cafeterías tampoco; incluso correos estaba cerrado.
La desobediencia civil, la huelga (esa herramienta de lucha que quieren extinguir) fue un duro golpe para los representantes del Estado y la Patronal en Gard; y fue secundada mayoritariamente ante el asombro de los partidos políticos y los sindicatos «representativos». El Presidente del Consejo general del gobierno del departamento, con indignación, calificó la huelga de «mierda organizada».
Una mierda organizada contra el «día del trabajo gratis», contra el colmo de los colmos. Una mierda organizada que me puso contento.
Crespo
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posted by Anarco-sindicalista @ 9:34 p. m.
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