CENIT portavoz de la regional exterior de la cnt-ait

"SI CADA REFUGIADO ESPAÑOL NARRASE SIMPLEMENTE LO QUE HA VIVIDO, SE LEVANTARÍA EL MÁS EXTRAORDINARIO Y CONMOVEDOR DE LOS MONUMENTOS HUMANOS" FEDERICA MONTSENY, 1978

19 noviembre, 2006

CENIT: Voz callada


El plural en este caso hubiese sido más adecuado, siendo una mujer la última víctima diremos, la voz.
Doce periodistas han muerto en Rusia desde la llegada de Putin al Kremlin en el año 2000; la última: Anna Politkovskaïa. Como los demás asesinatos, este tampoco será delucidado, aunque el nuevo Stalin prometa lo contrario. Y si por casualidad lo fuese, ¿es que sería el verdadero autor del crimen el castigado? No quisiera hacer proceso de intención, pero conociendo el percal y teniendo en cuenta los muchos precedentes, ¿quién pagaría, y para quién?
En el 2004 han muerto 53 periodistas, en el 2005: 63. En este día del 2006 son 54, a los cuales se les tiene que adjuntar unos 20 guías, intérpretes y asistentes… En el otro platillo de la balanza diremos que en Irak han muerto 107 periodistas en tres años, más que en 20 años en el Viet Nam.
Esta periodista de 48 años ha sido en el curso de estos últimos años, el ejemplo de moralidad en su país y más alla de sus fronteras, en ese estado corrompido ha seguido el ejemplo de Andreï Sakharov, no solamente en sus escritos y sus dichos, pero también actuando físicamente, ayudando las víctimas de la represión y de sus verdugos. No ha dejado de denunciar los crímenes del Kremlin, la guerra de Tchechenia - guerra que ha gangrenado la sociedad rusa.
Ha intentado de despertar esa opinión pública, adormecida en unas nieblas de lúcre, perversión, de abusos sexuales, de robos y prevaricación, ciertos de sus actos son dignos de ejemplo como cuando se propuso de mediadora de los rehénes del teatro de la Dubrovka, en Moscú en octubre 2002.
¿Quién ha matado Anna Polikovskaïa? Y sobre todo, ¿quién ha comenditado su ejecución? Tal vez puedan ser los “kadirovtsy”, supletivos tchétchenes, servidores del que podría ser el primer ministro y presidente de ese estado, nombrado por el tzarillo ruso, el denominado Kadirov un peligroso psicópata mafioso. Si decimos esto es porque se preparaba Anna a editar un libro sobre las actuaciones y exacciones de esa oscura pandilla.
Sea quien sea, es el Kremlin quien es responsable moral de ese crimen, creando el ambiente y las circunstancias, liberando los sentimientos nacionalistas y xenófobos de su pueblo, liberando las fuerzas negras.
Después de Anna, ¿a quién le tocará? ¿Cual será la nueva nota discordante?
Podremos lamentar que el presidente de la República Francesa, haya por motivos económicos, otorgado a Putin la más alta distinción del estado francés, la "légion d'honneur".
N.N.