CENIT portavoz de la regional exterior de la cnt-ait

"SI CADA REFUGIADO ESPAÑOL NARRASE SIMPLEMENTE LO QUE HA VIVIDO, SE LEVANTARÍA EL MÁS EXTRAORDINARIO Y CONMOVEDOR DE LOS MONUMENTOS HUMANOS" FEDERICA MONTSENY, 1978

19 noviembre, 2006

CENIT: Dichos y hechos


por S. FERNANDEZ CANTO

Rica Rusia y pobres rusos - es así como se podría catalogar al antiguo imperio eurasiático, que se extendía del Báltico al Pacífico, o -dicho de otra manera- la de "un rico país de pobres gentes", tal como lo definió Vladimir Putin cuando se hizo cargo del poder en 2000. "Y agradecidos" - podría añadirse hoy… En seis años el país se ha enriquecido, sin por ello hacer los rusos más pobres. Una proeza a la luz de su historia.
Disminuyendo de día en día su libertad de expresión, viviendo en el campo como en la época feudal, los rusos han, no obstante, constatado que, sobre el plan económico, su país ha sido unánimemente admitido en la Europa del siglo XXI, lo que les ha permitido recobrar su orgullo nacional en tanto que valor primordial para un 92% de la población.
Así los ciudadanos de la más reciente "democracia" en el mundo, que conservan un recuerdo vivo del zarismo y del comunismo, y que consideran los obstáculos a la libertad y a su posición económico y social - muy por debajo de lo que podrían esperar de un país potencialmente riquísimo - como un mal relativo.
Inclusive muestran gratitud hacia Poutine, cuyo segundo mandato se terminará en 2008, de haber restablecido la estabilidad, la dignidad nacional y toda proporción guardada, una cierta prosperidad.
Últimamente varios hechos han venido a confortar estos sentimientos. En otro tiempo dependiendo de los créditos internacionales "la economía rusa ha llegado a ser una economía de mercado normal" explica Anders Aslund del Instituto de economía internacional. Desde el 2000 el crecimiento medio anual del PIB (6%) contribuye a sacar de la indigencia a millones de personas, una actividad más intensa de la consumación y del mercado inmobiliario. Moscú ha destronado a Tokio en el palmarés de la población más cara del mundo.
"Nosotros hemos vivido mendigando, pero hoy la economía rusa está en medida no solamente de reembolsar sus deudas pero además de hacerlo rápidamente", se ha felicitado Putin. En efecto, el 16 de junio ha firmado un acuerdo por un reembolsamiento anticipado de la integridad de deudas hacia los países acreedores del Club de París. Para realizar este reembolsamiento de 23,7 mil millones de dólares, el más importante registrado por el Club, el gobierno ha sacado dinero de los fondos de estabilización, cuyos ingresos son excedentes gracias a la venta de hidrocarburos intensificados por los cursos mundiales muy elevados. Así como lo recalca el economista Peter Westin: "Rusia se ha convertido en una superpotencia no en términos de armamento pero sí en términos de petróleo."
Los rusos van a beneficiar, por fin, de la importancia de un país que la Banca mundial coloca, de aquí en adelante, en la categoría de "rentas medias superiores".
En todo caso, los rusos prefieren olvidar, que su nivel de vida se mantiene en una escala bastante inferior a la de los países del G8. Como también desean ignorar el reciente informe de las Naciones unidas, según el cual las regiones de Ivanovo, antigua cuenca textil de Komi con sus riquezas naturales, y del Caucaso destrozado por la corrupción y el crimen se desenvuelven en la más lamentable obreza. Una mancha sobre el orgullo nacional recobrado